La Teoría de los Cinco Elementos, junto con la del yin y el yang, constituyen la base de la Medicina Tradicional China.

Si nos ajustamos a una traducción más exacta, hablaríamos de 5 movimientos, pues en chino la palabra que se usa indica dinamismo. Los elementos no son algo estático, sino que están en continua transformación e interacción con lo interno y lo externo al propio individuo. 

La Naturaleza nos muestra que todo cambia, nada es permanente. Así mismo la energía que nos da la vida pasa por 5 fases (o movimientos), cada una con sus características, completando un ciclo. Por eso se contemplan 5 estaciones del año, en lugar de 4, y añade el estío o verano tardío a las ya conocidas por todos nosotros. 

 

La Teoría de los Cinco Elementos en la Medicina China

La Medicina China utiliza los cinco elementos para explicar cómo es la relación entre la naturaleza (lo que hay fuera) y nuestro organismo (lo que hay dentro). Nombra 5 elementos que lo componen todo. En función de qué elemento predomine, se darán una serie de características.

Cada elemento/movimiento se corresponde con:

  • un órgano y una víscera (tal y como se entienden en Medicina China)
  • un tejido corporal
  • un sabor 
  • un color
  • una estación del año
  • un elemento de la naturaleza
  • unas características psicológicas en equilibrio
  • un perfil psicológico en estado de perturbación

De esta manera, nos encontramos con:

  • La Madera: Asociada con el hígado y la vesícula biliar, así como con los tejidos tendinosos, musculares y articulares. Le corresponde el sabor agrio o amargo, el color verde, su estación es la primavera y su elemento es el viento. Está relacionado con todos los dinamismos de nuestro organismo, con la acción. Su perfil se corresponde con personas creativas, imaginativas, competitivas y dinámicas. Pero eso sólo cuando el elemento madera está en equilibrio, no perturbado. La madera necesita libertad y si no la tiene, se bloquea (se estanca). El estancamiento en la madera se relaciona con emociones como la frustración, la ira e incluso la agresividad. Todas ellas son parte del mismo desequilibrio. 
  • El Fuego: Vinculado al corazón e intestino delgado y los tejidos del sistema cardiovascular. Su sabor es el amargo, su color rojo, su estación es el verano y su elemento el fuego, el calor. Las característica de las personas Fuego es la palabra, la comunicación verbal. En equilibrio se relaciona con la alegría y la extroversión, en cambio sus rasgos psicológicos en estado de perturbación son la euforia desmedida o el otro extremo, la depresión, también la verborrea o incontinencia verbal.
  • La Tierra: Sus órganos son el bazo-páncreas y el estómago. Tejidos conjuntivos. Su sabor es el dulce, su color el amarillo, su estación es el estío (el final del verano) y elemento es la humedad. Representa la fertilidad. Se refleja en personas con juicio justo y equilibrio. Personas que destacan por su reflexión, ponderación y justicia. En estado patológico su rasgo es la obsesión, ansiedad, manías, preocupación…
  • El Metal: Vinculado al pulmón e intestino grueso. Su sabor, el picante, su color, el blanco, su estación, el otoño y el elemento correspondiente es la sequedad. Caracterizado por su optimismo, vitalidad, sensibilidad, nobleza y su liderazgo espiritual. En perturbación las emociones predominantes son melancolía, tristeza, apatía..
  • El Agua: Los órganos correspondientes son el riñón y la vejiga. Los tejidos la médula ósea. Su sabor, el salado, su color el negro, su estación, el invierno y su elemento el agua. Su predominio da personas valientes, con capacidad de lucha. Voluntad y determinación son sus rasgos en equilibrio. Miedo, celos, inseguridad y fobias los propios de su perturbación. 

Todos estos elementos influyen entre , tanto en el área patológica como fisiológica. Unos órganos o vísceras alterados provocarán emociones alteradas y viceversa.

A través de técnicas como la Acupuntura, la Moxibustión,  se pretende conseguir el equilibrio armónico de los cinco

La importancia del equilibrio en los Cinco Elementos

Aunque es algo complejo para los no familiarizados con la Medicina China diremos que este equilibrio queda regulado a través de los 4 ciclos: dos biológicos, y dos patológicos.

Los biológicos son:

  • Sheng: Es la energía generadora de apoyo de un elemento hacia otro, lo que se llama ciclo generativo. Es decir, cada elemento nutre al siguiente.
  • Ke: Cada movimiento tiene la característica de controlar y ser controlado por otro elemento. Es lo que se llamaría en medicina alópata, el sistema simpático y parasimpático.

 Los patológicos son:

  • Muzi y Zimu, sobreasistencia o inversión sobre el ciclo Sheng. Supone un bloqueo en el órgano al que debería asistir o apoyar energéticamente.
  • Wu y Cheng, sobrecontrol de éstas dos energías. No controlan los excesos de energía. Los bloquean con un sobrecontrol.

A la hora de tratar a un paciente, será el especialista en Medicina China quien deba encontrar donde reside el problema. Para ello valora mucho más que los síntomas que le cuente la persona, pues va a tener en cuenta todas las características físicas y psicológicas que hemos mencionado para concluir qué necesita esa persona. 

La Medicina China siempre buscará el equilibrio de las energías y los elementos, de manera que la persona fluya con los cambios que trae la vida y el paso de los años. 

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